Por José María Redondo Tortosa.
!!San Jaimito y San Manolo, Patronos de los foreros!! !!San Sarapioca y San Blas, San Mangani y San Julián, Patronos de la amistad!! !!San Juan Ramón y San Eva con San Pepe de Santiago, Patronos del Cafelito!! Como sois de los mejores os convido a un alipebre, que me cuesta mis dineros. Alguien salió del pesebre como cardo borriquero.
A pesar de que tengo un carácter jovial y que por ello me siento muy a gusto entre gentes que saben reír, que les agrada la ironía, el desenfado, la carcajada porque es una buena manera de alejarse de los mentecatos, los sosos, los amargados y toda esa cuchipanda de personas que disfruntan derramando mala baba, hay veces que me resultan intolerables, vamos que me cuesta trabajo aguantarlos, tengo que hacer un enorme esfuerzo para no mandarlos a que les den por donde gotean los porrones de Andújar.
Una de las virtudes del alma que valoro por encima de otras es la de la amistad. Decía Voltaire: AMISTAD, DON DEL CIELO, DELEITE DE LAS GRANDES ALMAS. Hay pocas palabras más hermosas que la de amigo. También Erasmo de Rotterdan dijo: LA VERDADERA AMISTAD LLEGA CUANDO EL SILENCIO ENTRE DOS PARECE AMENO.
Y Antonio Rivas sentenciaba: LA AMISTAD VERDADERA ES UNA DE LAS COSAS MÁS IMPORTANTES DE LA VIDA. Y para finalizar, otra frase sobre esta virtud dicha por Benjamín Franklin: TÓMATE TIEMPO EN ESCOGER UN AMIGO, PERO SÉ MÁS LENTO AÚN EN CAMBIARLO.
Tengo ya bastantes años como para poder decir que no me gustan las disputas, los enfrentamientos sin sentido, las discusiones acaloradas, despreciativas e hirientes provenientes de personas carentes del más elemental sentido de la educación. Es por eso que se hace cierta la frase de Goethe: CONTRA LA ESTUPIDEZ, HASTA LOS DIOSES LUCHAN EN VANO.
Muchas veces me he tenido que hacer la misma pregunta: ¿Por qué somos tan obtusos, tan bordes, tan idiotas? La discrepancia tiene que existir y, en en ocasiones, hasta resulta útil, pero con educación, con mesura. Ya lo dijo Martín Luther King: HEMOS APRENDIDO A VOLAR COMO LOS PÁJAROS Y A NADAR COMO LOS PECES, PERO NO HEMOS APRENDIDO EL SENCILLO ARTE DE VIVIR JUNTOS COMO HERMANOS.
Lo he podido comprobar en mis propias carnes. He sido injuriado, insultado, maltratado de palabra y difamado por algunas personas -y siempre escondidas en el anonimato- sin venir a cuento porque mis escritos jamás han sido redactados para molestar, pueden leerse todavía. Pero ¿Qué les lleva a estos personajes a comportarse de manera tan infame? Pienso que estos seres son incapaces del más leve atisbo de nobleza y que carecen de educación. A veces, incluso, si se les contesta a sus diatribas con ironía, se revuelven y despotrican, no toleran que se les trate con la misma vara.
Han sido muchos los amigos que me han aconsejado que no les haga caso, que lo mejor es ignorarlos, no contestar a sus mordacidades, pero creo que no es la manera adecuada, callarse es lo peor porque ellos dicen: CALUMINIA QUE ALGO QUEDA. En los foros almanseños entran cada día varias docenas de personas y muchas de ellas ni me conocen y al leer los mensajes de estos fulanos pueden llegar a pensar que tienen razón si no se les contesta de manera contundente, y entonces se ríen y se crecen y llegan a creer que han podido conmigo cuando me callo.
Conmigo puede la nobleza, la generosidad, la solidaridad, la buena educación, la verdadera amistad, la hombría de bien pero por esas mismas razones jamás toleraré al mentiroso, al hipócrita, al falso, al infame, al estúpido y si encima, con un apodo, sale para masacrarme injustamente, que se ate bien los machos.
Algunas veces he pensado que hay personas que por la falta de creencias o por su deficiente educación están abocadas a esa conductas reprobables. Decía Schopenhauer: LA RELIGION ES LA OBRA MAESTRA DEL ARTE DE LA EDUCACION DE LOS SERES, PUES ENSEÑA A LA GENTE COMO DEBE PENSAR.
A un rencoroso es muy difícil hacerle ver que su comportamiento es infame porque el odio mata la nobleza obnubilando la mente. Aquí se ha podido ver como muchos amigos míos le han contestado a uno de estos personajillos cuando dijo mentiras palpables contra mí, pero ni pidió perdón ni rectifico, se cambió el apodo y siguió con sus mentiras y asquerosidades.
Como estoy convencido que la verdad triunfa siempre y que para hacerla efectiva no hay que callarse, es por lo que siempre que salga alguien con infamias, mentiras y descalificaciones me tendrá enfrente de manera contundente pero, eso si, con educación e ironía.
Creo que es el mejor camino y a las pruebas me remito pues parece ser que han desaparecido al verse acorralados por la VERDAD.