En Almansa al día (10 – 10 – 12) de Tv Almansa. Cuando está Amaya, hay batalla

Así viene sucediendo. Y para el paciente telespectador es un revulsivo que le hace mantener no solo la atención sino despertarle del sueño de los justos y seguir con atención e interés lo que sale del campo de juego en la mesa que presenta y controla Ana Garrido.

Y está claro, es la oposición política; ¿qué sería si la cabeza solo hiciera tolón, tolón?.

Recatada imagen da hoy en pantalla que llena la presentadora Ana Garrido, con un conjunto refinadísimo que guarda y desprende calidez.

Van a charlar (será dirimir) sobre la preparación de los Presupuestos municipales para 2013

(como una continuación a la entrevista efectuada al Alcalde en ese programa anteriormente), cuales son las prioridades, las inversiones.

Aunque, tambien es evidente, que hay maneras y formas de golpear la bolita, con justezas, desvaríos, cortedades, pasadas… Preparadas susbags (me j. ¿por qué no bolsas?), con maderas y hierros diversos se dirijen al tee box (me jo. ¿por qué no soporte de salida) para conducirla hasta el approach (me jor. ¿por qué no aproximación?) y con un putt (me joro. ¿por qué no golpe corto?) en el green (me jorob. ¿por qué no verde?).

Javier Bueno, brillante de piel y liso camisero beige pardo; toca madera y se concentra en que están estudiando los ingresos y gastos. A todo le da más o menos normalidad  a tono con su aspecto uniforme.

Pascual Blanco, aún con camisa veraniega rayada verticalmente, lo mismo con “encaje de bolillos”; inversiones, las que han venido con fondos FEDER (Mercurio y Aguaviva) y poco más, pero que los gastos fijos se cubren con los ingresos fijos.

María José Almendros sencilla y elegante, ella, con su vestir y decir, compresiva con los gastos e ingresos y que donde están las diferencias de criterio de actuar es en las posibles inversiones.

Amaya Villanueva también sin floripondios, porta chaqueta oscura rayada (de ejecutiva  que cubre camisa clara desabotonada hasta el punto de imprimir sin abalorios a cuello descubierto determinación y coraje en las críticas. Saca desde el hoyo de salida su perfecionado swing (me joroba ¿por qué no balanceo?). Exhibe su  deber ver que plan de Ajustes hacen – ha comenzado formal y suavecita conteniéndose aún luciendo unas mechas aparentemente desordenadas y rebeldes –  requiere que den, a ser posible, más información a ver si van a quitar algún servicio más (¡qué finamente pone la bola en la fairway!) o modificaciones; muestra preocupación por las reducciones de las atenciones sociales, como dependencia o ayudas a escuelas infantiles.

Con todo esto han iniciado la salida con un driver cada cual con su backswing - downswing característico sin que ningune se vaya de la calle. Caminan llevando sus palos concentrados más bien cada une en lo que tiene que tiene por delante todavía.

Bueno en su turno con una madera pega a la pelotita en su línea, sin salirse al rough, con la vista en el horizonte de los ingresos limitados para las inversiones, las dos ya nombradas en marcha y en la mente plus ultra otras como la estación de autobuses y el arreglo de calles; no deja de mirar a su lado para decir que solventaron - mientras la luz le hace brillar la calva - el asunto de la dependencia; que andan muy ajustados algunos meses para cubrir gastos, además de ir quitando la deuda y pagar a proveedores.

Blanco toma el iron e impacta la bola hacia terrenos alejados de los búnkers – sin despeinarse ni una sus canas más ralas – preocupándose por la financiación extramunicipal, estando muy contundente con no gastar más de lo que el Ayuntamiento puede y con los recursos que tiene. Se yergue para comprobar la dirección y sentido del viento lanzando animoso un signo que aunque pueda parecer simple es esencial (a su parecer), tal que una administración se debe limitar a tener tres funciones: pagar, adelgazar y no crear problemas (extendiéndose en explicaciones y críticas, situándose en lugar apropiado y ventajoso para ejecutar el siguiente lanzamiento).

Almendros, queriendo situarse por el centro de la calle – agitando la larga melena brillante con movimientos cortos y rápidos –  no quiere que le quiten su lugar y situándose en posiciones semejantes a Blanco afina y redondea alegatos, se desmarca en lo posible de los demás y pendiente del público suelta que no harían lo mismo, para desembocar en que no se meterían en otro proyecto [¿se referirá a Aguaviva?] para seguir manteniendo servicios como los de guardería y acercándose más a los espectadores se pone en defensa de lo básico en estos tiempos que corren,  con las personas que lo están pasando muy mal.

Villanueva coge esta última estela y se arroga con lo de “los ciudadanos no entienden algunas decisiones que se toman” [todos quieren ser la voz del pueblo que clama], mantiene la calma y suavidad en el habla mientras otea el campo de juego y expresa su creencia de que en tiempos de crisis ha de reforzarse más lo público [siempre es interesante saber con qué medios; entonces cobraría verdadera fuerza el golpeo por encima del water hazard  directo para tratar de conseguir un eagle], serena, sin embargo, dice que hay que hablar con tranquilidad a sus oponentes [cuando estos han estado sosegados, hasta ahora] y acogiendo la voz del pueblo otra vez suelta que los ciudadanos no entienden que hay dinero para unas cosas y no para otras; continua con suma suavidad, pero con dureza verbal de significado conque no se ha contado con su grupo para los ajustes y salpica críticas de actuaciones por exceso unas y por defecto otras. Con todo el golpe le ha dejado satisfecha, salvando los obstáculos, al ver que su posición ha quedado adelantada y ya se divisa la sede social del hoyo final.

En la ronda siguiente:

Bueno, toma tambien la trayectoria de Blanco por el lado derecho del adelgazar y no se complica con la elección de driver continuando machacón por el centro de la calle, y para alcanzar lo bola de la competidora precedente (que dio un impulso potente con lo de las escuelas infantiles) plantea hábilmente que pasaría si para pagarlas a todo el pueblo se les pidiese la aportación [astutamente, porque el dinero que sí sale de todes asíse palparía más, que cuando por la menor concreción todo para todo, parece que viene llovido] y con todo, dice que es razonable que paguen quienes usan el servicio teniendo ademas unos precios por debajo de cómo se dan en otras ciudades, así como el agua aún con la subida. Alcanza así una posición pareja de atisvamiento hacia el último agujero.

Blanco, de inmediato realiza un dinámico movimiento para un ajustado golpeo conque a él también le gustaria decir a les ciudadanes lo que les gusta escuchar, ¡cómo no les cuesta nada decirlo! (¡a buen entendedor!), que es la diferencia de quien tiene la responsabilidad de quien está gobernando; y queriendo llevar el juego a su terreno saca de por sí, precisamente lo que tantísimas veces oye de con el dinero de los proyectos Mercurio y Aguaviva…, pasa decidido ha hacer un panegírico de los proyectos por la gran cantidad de fondos dinerarios que vienen y que si se renuncia se pierden, con lo poco relativamente que tiene que aportar el Ayuntamiento y que con ellos se generaría  riqueza y un aporte de aumento de la actividad económica con consecuencias de empleo [casi se desquicia de que no quieran entenderlo y saliéndose de calle arriesga por encima de las ramas, atajando, y logra situarse a la altura de sus precedentes “golfistas”]; y para asegurar la posición añade, con mucha vista política, lo que le había comentado el Alcalde, “que si hubieran renunciado a esos proyectos, les estarían poniendo verdes”. El parloteo picotero con Villanueva ya comienza, y ella: “no te lo digo yo, es lo que dicen los ciudadanos” [otra vez los ciudadanos por delante] y él: “estais intentando reventar, y ella: “vamos venga”, y termina Blanco con su decisión de llevar adelante esos dos proyectos con sus consecuencias para él positivas.

Almendros, algo escocida, dice que Pascual opina por los demás “es que si hubieran dicho” y ella opina por su grupo: es que si no pasa no se sabe… (se oyen de fondo dos apoyos de Villanueva) [la unión hace fuerza]; entra Almendros a desmenuzar los dos proyectos para ir soltando que hay otras prioridades, que el proyecto no es malo, pero no es el momento (ve mejor el Mercurio), que es una diferencia de criterio [obvio].Lanza con seguridad su bola soflamada al pegarse por el lado seguro de la amplia calle y no aventurarse a cometer un bogey.

Villanueva, rebota con que no quiere entrar en ese debate al que le quiere llevar Pascual Blanco, pero no deja de decir que Pascual les cuenta a los ciudadanos [otra vez] lo de Aguaviva  y lo malisimos que son los demás que no apoyan; que es mentira y que están un poco aburridos de ese debate [sin embargo queda una pequeña laguna cuando les ciudadanes se pregunten cual es su opinión sobre esas afirmaciones de Blanco y birla birlando no manifestar porqué ahora no apoyan a Aguaviva y como debería ser para que dieran el sí] se va a lo de las escuelas infantiles y sobrevuela por lo público y la solidaridad, haciendo una disyuntiva tajante entre lo publico y lo privado, añadiendo que lo que no sea competencia de ellos… y se oye de fondo interrupción de la parte Blanco–Bueno. [Están sintiendo la presencia del final del match y quieren dejar grabado su marchamo, con lo que se establece un batiburrillo de unes y otres: se ha podido salvar, salvar temporalmente, mientras se pueda, hubiera faltado, hubiera estado bonito, unos estamos con lo público y otros con lo privado, la bondad de lo público, también somos muy bondadosos, no se trata de bondad  se trata de soldaridad, no estamos hablando aquí de beneficiencia [astuta está], tu has usado bondad, ¿qué hacemos les subimos los impuestos a toda la población para mantener por que la Junta /(corte) los impuestos algunos están al máximo nos queda muy poco más. Y continúa Villanueva con el uso de su turno, queriendo llegar y llega a que de la venta del agua (se oye el agua no se vende [lo de siempre lo uno y lo otro]) en lugar de usar en Aguaviva, para otros fines más directos sociales; y vuelta a las interrupciones: no es beneficencia es asistencia, tu has empleado bondad, proyectos que darán actividad, en otros sitios no, y qué,  no es derecho constitucional, deficit que recairía en el resto de los ciudadanos, irresponsabilidad es comprometer una serie de cosas que no se pueden cumplir, ¿no? yo creo; y sigue Villanuevaconque  hay que hablar de las productividades en el Ayuntamiento y personal; que no les van a consultar, que se mantenga lo público defender sobre todo protección social y en materia de empleo. [Se quiere soltar todo el lastre por las apreturas del tiempo y resulta para el espectador un conglomerado, un revolutum] y Villanueva siempre con su lustroso talante y talento, arriesga ya pegando un golpe cercano al water hazard y coloca la esferita en los menores resquicios que dejen y aunque no los dejen los abre ella, y con el palo idóneo la pone en el sitio más inverosímil donde duele (cuando con el palo da un buen golpe marca de la casa, sintiéndose ganadora alza el vaso, se autorregala un traguete de agua y complacida esboza una ligera sonrisa de satisfacción como si hubiera sido decisivo).

Van a terminar ya el hoyo final que es un par cinco, habiéndose situados todes en el green, resignados a no conseguir ninguno ya un albatros ni un eagle. Van a pegar con el putter el posible último putt al quedar la posibilidad de un birdie si la meten en uno; por el desencadenante final lo tienen todes muy  probable, pero el tiempo apremia y los nervios pueden alterar la precisión del tiro.

Bueno augura un futuro halagüeño  y aproxima mucho pero se le queda la pelota a menos de un palmo (para embocar después fácilmente y hacer el par).

Blanco reitera el tema de pagar , adelgazar y no crear problemas, y de que se va a salir de la crisis a pesar de los políticos, por los emprendedores; vaso de agua y empujando la esfera suavemente va derecha, pero una  brizna de hierba la desvía ligeramente haciendo que describa media circunferencia en el borde del hoyo para quedarse fuera a dos pulgadas (para la próxima).

Almendros quiere ser optimista pero este equipo de gobierno no se lo va a poner fácil a los ciudadanos; intentaremos entre todos; aprovechando la pequeña pendiente de subida impulsa con decisión la bola, que se pasa y a retrocede con derechura hacia el hoyo pero no lo suficiente para que caiga, en el quedándose a un codo (luego superfácil).

Villanueva al rebufo también quisiera ser optimista pero oyendo en este caso a los representantes del gobierno no lo puede ser, porque hablan de crear empleo como si los ciudadanos lo pudieran digerir (otra vez la ciudadanía la pone al frente), y que le hubiera gustado que en el debate se hubiera aclarado más lo de los Presupuestos; y resuelta lanza la esferita por un terreno más directo pero algo embarrado, la bola corre pero se le va pegando  la arcilla a los dimpels de la pelota hasta el punto que yendo all right, llega hasta la embocadura del hoyo, pero ha tomado tal grosor de barro de forma que queda sostenida por los bordes y no la deja caer en el hoyo, quedándose encima de él. Lo que ocasiona discusiones de si entró o no entró; y ante la indecisión del jurado popular, los asistentes, cada cual con su interpretación, abandonan el campo de juego acelerados por la lluvia que comienza a caer.

Más tarde, sin nadie presente, la bolita acabaría por caer al fondo del hoyo por el golpeo de las gotas de lluvia.

Las normas del golf  son muy estrictas, hasta en la vestimenta. No se les veía a los contertulios lo que calzaban, pero me extraña que llevaran deportivas.

Cordial

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