Comentario al Artº del Sr. García Lozano

SR. D. LEANDRO GARCÍA LOZANO

ALMANSA

Acabo de leer, con auténtico interés, el artículo que ha publicado  en “El Cafelito del Viernes” bajo el título de:


LA PROFESIONALIZACIÓN DE LA 
POLÍTICA.

Suscribiría la totalidad de las cuestiones por Vd. mencionadas, por entender que el principal deber de todo político que accede al Poder de una manera democrática - de otra manera no lo entendería - es trabajar por su Comunidad de una manera generosa y siempre desinteresada, nunca como un medio de ganarse el sustento. Nadie, y esto no debe olvidarse, le ha obligado a ofertar su nombre, como candidato, en una lista electoral y esto siempre bajo el amparo o paraguas de unas siglas, generalmente nobles y con un alto grado de dignidad a sus espaldas.

Sólo entiendo la política como un acto cívico para servir a la ciudadanía por la que te presentas, como un acto generoso al servicio de los demás, sin medir ni escatimar el tiempo y esfuerzo que se tenga que dedicar a esta noble tarea. Considero que nunca debe usarse el “cargo”, tan deseado éste, en beneficio propio o de los tuyos, pues caso de hacerse así, tendríamos que pensar que el acceso a la política sólo ha sido un medio para vivir a costa de sus convecinos.

Este es, a mi modesto entender, el único comportamiento ético de cualquier político, independientemente del nivel al que acceda, si verdaderamente pretende dignificar el puesto o cargo que ocupe. El aprovechar su condición de “electo” para medrar, fustigar al adversario o colocar a sus familiares,correligionarios o amiguetes es una auténtica felonía y un acto política y socialmente siempre reprobable.

Hace mención a la “unanimidad” a que llegaron todos los concejales elegidos el pasado 22-005-11 en el primer Pleno al que asistían. No trataron de la tremenda crisis que se está viviendo en nuestra ciudad, del gravísimo problema económico que tiene gran parte de la población almanseña y de la enorme dificultad que tienen muchas familias para cubrir sus necesidades más elementales, un mes tras otro. NO, sólo trataron, y como tema monográfico, (debemos pensar que era su única preocupación) el tema de las liberaciones, es decir con qué medios contaremos durante estos cuatro próximos años para nuestra subsistencia. ¡De pena! Cambian las personas, cambian los partidos, pero lo único que no cambia a lo largo del tiempo es la práctica de nuestros insignes representantes. ¡Más de lo mismo!

La Corporación Almanseña, en esta sesión, se involucró al límite y se afanó para que el reparto de prebendas satisficiera a todos. Lo consiguió plenamente. Éxito total. Todos de acuerdo a la hora de liberar a concejales, con media jornada o jornada completa, eso es lo de menos. ¡Qué generosidad la suya! ¡Qué ejemplo para las venideras generaciones!

Lamentablemente considero que con esta práctica nuestros políticos no están, como creo debería ser su obligación, a la altura de la Sociedad de la que proceden y a la que representan. Posiblemente estos señores/as se crean habitantes de  otro mundo, pobladores de otra galaxia. Ya va siendo hora de que pongan los pies en la tierra y se ajusten a la realidad., por dura que ésta sea. Vivimos épocas muy difíciles, pero es en estas épocas cuando se ven los buenos gobernantes, para los momentos fáciles, para los cargados de medios, cualquiera servimos.

No me cansaré de insistir, una y mil veces si con ello soy capaz de sembrar en nuestros dirigentes un mínimo de cordura, que no son conscientes del tremendo drama que existe en las familias de nuestra localidad, con alto índice de paro y con escasísimos medios de subsistencia. La sociedad almanseña lo está pasando muy mal. Almansa está atravesando unos momentos difíciles. A todo esto sus políticos, las personas a las que ellos han votado, sólo piensan en mejorar su economía a costa del erario público. ¡Una auténtica pena!

Para justificar sus emolumentos, en algunas ocasiones hasta cuantiosos,  suelen convertir las concejalías a las que han sido asignados en unidades de trabajo bajo su jefatura, es decir en convertirse en Técnicos de Grado Superior de la Administración Local por mor de las urnas. Para cerrar el círculo no les falta nada más que “jubilar” al funcionariado de los ayuntamientos y en su lugar poner a sus amiguetes o a los miembros de su partido con inferiores sueldos en su vida civil. ¡Hasta dónde se puede llegar!

Entiendo que los grupos políticos necesiten de personal de “confianza” para determinadas labores de apoyo al Partido, pero sí de apoyo al Partido se trata, es el propio partido, y a sus expensas, quien tiene que soportar este gasto. Los grupos políticos ya tienen su propia asignación presupuestaria, que obligatoriamente deberá figurar en los presupuestos municipales y  que varía en función del número de concejales electos que cada Grupo Político posea. Al ser esto así, es decir al tener cada partido su financiación por ley, no entenderé nunca que los partidos vayan cargando de gastos el presupuesto del Ayuntamiento con estas pagamentas y los órganos superiores de la Admón. Local se lo consientan.

El Ayuntamiento de Almansa, por fortuna, dispone de una más que suficiente y eficiente plantilla de funcionarios, de todos los niveles, para resolver TODAS las situaciones administrativas que pudieran presentarse en la localidad. Ante esta situación mi pregunta es: ¿Para qué sirven los Jefes de Unidad “In pectore” procedentes de las urnas? Posiblemente no hagan nada más que dificultar las normales respuestas o soluciones a las cotidianas situaciones que se puedan producir en el gobierno municipal. ¡Qué necesidad de duplicar personal!

El político debe “marcar” las normas o reglas de juego para que los funcionarios las observen, siempre, como es lógico, dentro de la más estricta legalidad constitucional. 

   

                                                Julián Cuenca