¡Hola! Hay personas que entran en la historia local por su talento, personalidad, arte u obra realizada. Santos lo ha hecho de la mano de unos botijos de agua fresca, ofrecidos en la Estación de ferrocarril a viajeros sedientos, asomados en las ventanillas de unos trenes que ya son piezas de museo. Detrás de su sonrisa se ocultaba el deseo de agradar a los viajeros y de paliar de algún modo las incomodidades de su viaje, precisamente aquí en la estación de Almansa, parada obligada entre La Mancha y el Reino de Valencia.
"Los caminos de Dios son inexcrutables". Los caminos de la Historia también.
Durante varias décadas este hombre, con cierta discapacidad, no ha faltado a su cita, en la Estación de ferrocarril, con los trenes frecuentes de la época. Los viajeros del “Taf”, “Malagueño”, Cordobés” o el mismo “Shanghai”, que parecía sacado de una película del Oeste, asociaban la parada breve en Almansa con un trago de agua fresca que les acercaba diligente el buenazo de Santos en sus botijos. Para los almanseños de más de 40 años, la figura de Santos el aguador es inseparable de la estación de Almansa. Su sobrina Mª Carmen nos acerca a la personalidad de este buen hombre, convertido ya en leyenda no sólo de la historia de la estación de Almansa sino del ferrocarril en el pasado siglo.
1-¿Cuándo
dejó de ir a la Estación su tío Santos? ¿El motivo?
Alrededor
de los años 80.
Su
labor dejó de ser necesaria cuando los trenes se modernizaron y
comenzaron a incluir cafetería en los vagones.
2-
Háblenos de su vida brevemente.
Nació
en Santa Cruz de Mudela (Ciudad Real) en 1933 y vino a vivir a
Almansa en abril de 1941 con sus padres y sus 4 hermanas. Su padre
era ferroviario y fue trasladado aquí.
Fue
al colegio “José Mª Pemán”, que ahora es el “Miguel
Pinilla”.
Poco
después de llegar a Almansa su padre falleció por lo que quedó al
cuidado de su madre primero, y de su hermana Juana y su cuñado Juan
“Sonajas”, con los que ha vivido muchos años. Ahora lo cuidamos
mi hermana Rosa, su marido Lorenzo y yo.
3-
¿Qué carácter tiene?
Es
bastante tranquilo, solitario y nunca protesta por nada. Desde hace
algunos años sólo sale de casa para ir a comer con su hermana Pepa
y sus sobrinos. Su movilidad se había reducido bastante y sufrió
varias caídas, pero hasta ese momento siempre salía y pasaba horas
por los Jardinillos y el Paseo de la Libertad viendo pasar a los
vecinos.
4-
¿Por qué iba a la estación con botijos de agua?
Él
lo había visto en la Estación de Baeza, donde su padre estuvo
destinado algunos años. Antiguamente, los trenes no disponían de
cafetería (ni de tantas otras cosas que ahora nos parecen tan
normales), a los viajeros no les daba tiempo a salir del tren cuando
éste paraba en las estaciones, así que Santos les acercaba el
botijo por la ventanilla. También les ayudaba a bajar las maletas.
5-
¿Cómo veían los ferroviarios y el Jefe de Estación en particular
lo que hacía?
Bien,
en aquellos años era lo normal. Santos siempre se comportó bien y
todos le apreciaban mucho. También le permitían guardar los botijos
en las instalaciones de la Estación.
6-
¿Era su oficio el de “aguador” o una manía como otra
cualquiera?
Suponemos
que lo hacía por ocupar el tiempo y ganar algo de dinero.
7-
¿Qué opinión tenía él de lo que estaba haciendo? ¿Y la familia?
Muy
buena. A él le servía como entretenimiento, y la familia veía que
estaba bien y ocupado en algo.
8-
¿Cobraba o le pagaban algo? ¿Cuánto dinero solía sacar al día?
No
pedía una cantidad concreta, los viajeros le daban una propina. En
cuanto a lo que ganaba diariamente, no lo sabemos, siempre ha sido
muy reservado con sus cosas y con el dinero sobre todo. Aunque no
pensamos que sería mucho.
9-
¿Cuál era su horario? ¿Qué trenes eran sus preferidos?
Suponemos
que no tendría un horario fijo, acudía a la estación según los
horarios de los trenes. Santos nombraba “el Malagueño”, “el
Correo”, “el Cordobés”, “el Expreso”, “el Taf”, “el
Shanghai”…
10-
¿Le llamaron alguna vez la atención?
Por
parte del personal de Renfe nunca, su comportamiento siempre fue
bueno.
11-
Cuéntenos algunas anécdotas.
Cuando
quedo huérfano, para solicitar su pensión de orfandad fue necesario
que viniera un forense de Valencia a valorarlo. Este hombre recordaba
a Santos de sus paradas en Almansa y no quiso cobrarle sus
honorarios.
12-
¿Conoce Vd. algún caso parecido al de su tío Santos?
No,
solo sabemos del aguador que había en la Estación de Baeza. En
Almansa no ha habido ningún otro.
13-
¿Sabe si alguna institución se ha dirigido a él para darle las
gracias por su labor hospitalaria y simpática?
Hace
años, la Asociación “Torregrande” lo incluyó en una exposición
fotográfica dedicada a personajes populares de Almansa. Le hicieron
fotos posando con el botijo.
La
verdad es que todo el mundo lo aprecia y preguntan por él a la
familia habitualmente.
Sra.
Mª Carmen Sánchez del Fresno, ¡muchas gracias por sus palabras!
Dígale
a su tío Santos que la gran mayoría de adultos almanseños le
agradece su presencia simpática y constante en la Estación de
Ferrocarril. Y que le siguen echando de menos cuando a ella acuden.
Cyrano
de Bergerac 20
de Enero de 2013.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
El Cafelito del Viernes no se responsabiliza de las publicaciones y opiniones vertidas por los usuarios contra terceros, se reserva el derecho y se compromete a publicar gratuitamente opiniones de quien se viera aludido. Tanto las colaboraciones como las alusiones, comentarios y aportaciones lieterarias no deberán vulnerar el respeto a la dignidad de la persona, ni serán discriminatorios, xenófobos, racistas, ni atentarán contra la juventud o la infancia, el orden o la seguridad pública o que, a nuestro juicio, no resultaran adecuados para su publicación, informándole de ello y de los motivos que se dieran.
El remitente de una publicación será el único responsable de lo publicado ante terceros, asume la responsabilidad derivada del escrito y se responsabiliza de no provocar daños en los sistemas físicos y lógicos de esta web, de sus proveedores o de terceras personas, introducir o difundir en la red virus informáticos o cualesquiera otros sistemas físicos o lógicos que sean susceptibles de provocar los daños anteriormente mencionados; intentar acceder y, en su caso, utilizar las cuentas de correo electrónico de otros usuarios y modificar o manipular sus mensajes.
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.