Ocurrencias simplemente

x  Cuando hay que echar mano de algún agarradero, se oye a políticos de todos los signos – si la coyuntura les es favorable - que quien debe gobernar es la lista más votada. Ni por unos y otros se dice cuando, en tal caso, le diera el poder a su contrincante. ¿Cómo casar esto?.

¿Se piensa a fondo y se prevén las consecuencias, por ejemplo, de que el alcalde de Almansa fuera de la lista más votada?.¿No se consideran las alianzas entre los más parecidos que conjuntamente se oponen a esa alcaldía?. Parece que no se recapacitase despacio y profundamente en la dificultosa o enrevesada gobernabilidad o gobernanza (otra de moda) que ocasionaría, sobre todo si lo es por mayoría simple la lista más votada, en el caso de que la oposición contraria al partido gobernante uniendo sus votos superasen a los de quien gobierna, podrían hacer que la situación fuera ingobernable, pues no podrían aprobar nada que pasase por el Pleno si así lo pactara la oposición aliada adversa.

Cuando se habla del número de concejales electos de cada lista como representación de la voluntad del pueblo; ¿qué es más representativo de sus ideas?: ¿que tenga el poder un partido con mayoría simple o que lo tenga una alianza de partidos más afines entre sí y que sumados le den la mayoría absoluta?; los votantes de estos partidos ¿qué preferirían? ¿que gobiernen en coalición con otro u otros parecidos, o que gobierne un partido alejado, con el que tienen poco o nada en común?.

Cuando la ciudadanía vota lo hace al partido que prefiere, incluso previendo que no va a obtener mayoría absoluta, pero también sabe que el alcalde es nombrado – con la legislación actual – mediante votación de todes les concejales (una elección indirecta desde la ciudadanía votante). El voto pues lo emite sabiendo los condicionamientos que existen, pues si por ley el alcalde hubiera de salir de la lista más votada directamente, es posible que el votante modificase su voto haciéndolo hacia el partido más parecido a su línea que tuviera más posibilidades de ganar (aunque en realidad, al ser las elecciones locales de circunscripción única, lo que en definitiva va a dar el poder es a la posible alianza que proporcione mayoría absoluta para hacer gobernable el Consistorio municipal).

x  ¿Se ha reparado en pensar, qué finalidad cumplen hoy día los mercados municipales?

En una ciudad que se hiciera nueva ¿se construiría un mercado municipal?. Antiguamente las ciudades establecían ferias (en el sentido nato), sitios donde convergían las ofertas, los tratos, las compraventas, donde eran esperadas las novedades y se redireccionaba la economía. Con todo el poder local, era lo suyo, favorecía esta actividad tan peculiar e importante, aparte de representar la entrada de pingües beneficios para la localidad.

Los mercados municipales que existen son la conjunción de muchos puestos de venta de gran diversidad en un gran local común. Ahí están y seguirán mientras que de la ley de la oferta y la demanda se derive un rendimiento merecedor de querer continuar. Pero al tiempo, en esta época, concurren en el negocio una numerosa oferta comercial distribuida ampliamente, no dejando nicho económinco sin explotar, en feroz competencia, tratando de acaparar clientela, ofertas, rebajas… así que con este panorama y estando supercumplida la demanda, ¿qué servicio social presta un mercado porque sea municipal?, a no ser que sea el de procurar oportunidades para que se puedan establecer comerciantes con menos posibles en unos locales pagando un alquiler; pero habría que comparar esos alquileres con el de locales en las calles; o fuera ya de lo directamente social si es una fuente de ingresos para el municipio que repercutan en beneficios sociales.

El poder, como es el que rige, social-liberal, interviene más o menos (según el sistema político) con las correspondientes competencias, actúa delimitando el marco de la libertad de mercado dentro de unas normas reguladoras, y proporciona un modelo entreverado de intervencionismo y de albedrío, en un equilibrio inestable.

x  Los cambios generacionales se producen por muchas causas, pero las de carácter tecnológico son las que influyen más claramente en la concepción de la vida y en los cambios adaptativos a ellos. Se está produciendo, se está de lleno en ella, una revolución en los modos de vida constituyéndose una nueva era, la de la ELECTRÓNICA. Los aparatos, incluso algunos inventos antes eran de comprensión general. Era común entender el funcionamiento del telégrafo (con las inevitables limitaciones si se escarba o profundiza… como en todo ¡pero para andar por casa se entendía), del pararrayos, de la máquina de vapor, del motor de explosión y de el de combustión, de la bicicleta, de la máquina de escribir manual, del molinillo de café manual, de una máquina de fotos de cinta, de una bombilla de filamento, y muchísimos más que en muchos casos se saben arreglar sin tener muchos conocimientos científicos y técnicos, solo con conocer su funcionamiento basado en la mecánica y en la electricidad. Pero a ver cuántos conocen los entresijos de un ordenador y como meterle mano, de un teléfono con internet, de una bombilla led, de un pendrive, una máquina de fotos digital, etc. donde la base es la electrónica.

Sépase en su punto, sin pasarse

Lopiu de la Estepa